lunes, febrero 09, 2009

Salida dominguera: El barro tenía un precio

Mañana fría, pero despejada, solecito, Iñaki con su Trek nuevecita... y después de la que ha caido estos días, lluvia, nieve, más lluvia, pues bien, no se nos ocurre otra idea que irnos a hacer nuestra rutita dominguera por el Camino de Quero, que si sí, que si no, que pillamos vuelta, que está bien, que está mal, discusiones previas, el resultado, es que nos vamos hacia Quero, rodeando la Hidalga por la Loma de los Cantareros, para evitar, en la medida de lo posible las zonas conflictivas, salida prometedora, 15 bikers, con ganas, el transcurso tranquilo, entretenido, lo habitual en estos casos, pero mira por donde, cuando cojemos la loma de la Hidalga, y empiezan los primeros charcos, retrocedemos: zona intransitable, seguimos por el monte que recorrimos este verano en nuestra 3ª ruta, pero en dirección contraria, y pasa lo que tiene que pasar, que cuando se acaba el monte, empiezan las viñas, y con ellas, los charcos, y el barro, primero llevadero, ruedas embozadas pero se puede andar, pero... y cada vez más, se acaban atascando las ruedas y toca poner pie a tierra y usar lo mejor para estos casos, los sarmientos que abundan por esta zona, así hasta que llegamos de nuevo al camino de la ruta del quijote,
Ejemplo: la bici de Yosu
Prueba gráfica de cómo quitar el barro...

a pocos kilómetros de Quero, resultado, terminamos como el rosario de la Aurora, seguimos 12, porque 3 se vuelven para el pueblo, llegamos a Quero, en la gasolinera, gracias a Juanjo que lleva 2 eurillos, les tiramos agua a las bicis y las medio limpiamos,

Juanjo, efectuando labores de limpieza...
El lavadero ocasional
Recogiendo y nos volvemos...

y cogemos el camino de vuelta... nos quedamos uno menos, 11, porque Jose, decide volver a Alcázar por la carretera, y nosotros, pues mira, si el camino está bueno, nos volvemos por el camino.... craso error, más adelante el camino está peor aún que por donde hemos venido, esto ya es el caos total, aquí cada uno pasa la zona de barro como puede, unos a pie, otros haciendo equilibrio sobre el barro, y otros... otros nos cargamos el cambio al hacer fuerza, resultado final, Javi y Yo,
Mi biiiiciiii...
La de Javi con ruedas de camuflaje...
a patita por haber hecho el bestia y romper la bici, el resto una vez pasada la peor zona vuelven a emprender la marcha, aquí se pone en marcha la imaginación y montamos una solución improvisada, a Javi lo remolca Yosu usando una camara de repuesto, y a mí me remolca Paco, anudando al manillar y al sillín, el fleje de un palet, que había tirado en la viña, así hasta que nos encontremos con la furgoneta a la que hemos avisado para que viniera a por nosotros, y que nos recogió pasado la Hidalga.


Prueba gráfica del invento...(pa' habernos matao)

Pues bien, ya sabemos por dónde NO hay que ir cuando llueve, en fin, que esto es lo peculiar que tiene el MTB, que sabes cómo sales pero nunca sabes cómo vas a volver a tu casa.